Como ya os avanzaba en el post “La música amansa a las fieras” y estando yo de vacaciones “en un lugar de la mancha de cuyo nombre no quiero acordarme”, pensé que sería una buena idea escribir sobre algunas cosas que hay que tener en cuenta a la hora de viajar con niños. En esta ocasión me he decidido a escribir sobre cómo hacer una maleta cuando se viaja con un bebé, ya que es ahí dónde aparecen las primeras dudas; cuanta ropa llevar, si coger muchos pañales o no… Si sois padres primerizos seguramente que en los primeros viajes llenaréis las maletas de cosas que no utilizaréis, pero cuando al tercer o cuarto viaje con vuestros bebés, comprobéis que la mayoría de las cosas ni las habéis sacado de la maleta, entonces ya empezaréis a economizar el espacio y dejaréis en casa todo aquello que no se necesita. ¿Y cómo saber lo que vamos a necesitar y lo que no? Con este post espero poder ayudaros a preparar la maleta de vuestros bebés para cuando vayáis de viaje.
Llevar solo cosas necesarias
Desde que nació nuestra hija hemos hecho varios viajes largos con ella y al principio cargábamos con todo el kit de supervivencia, pero ya nos hemos dado cuenta de que la mayoría de las veces volvíamos con la mitad de las cosas sin tocar y por eso ya hemos decidido llevar solo lo que realmente vamos a necesitar. En nuestro primer viaje pecamos de ingenuos y llevamos nuestras propias toallas por si las que había donde íbamos no eran adecuadas para nuestra hija y por supuesto el botiquín de primeros auxilios por si había alguna urgencia; una caja entera de suero, otra de gasas, cremitas varias para el culete, y alguna medicina para “por si acaso”. Pues bien, si queréis que os de mi consejo, todo eso sobra. Algunas toallas son mejores que otras, pero todas sirven para secar a nuestros bebés cuando salen del agua y lo mejor es llevar solamente lo imprescindible del botiquín; las medicinas necesarias, un par de gasas y dos botecitos de suero, porque si necesitamos más seguramente que no nos costará mucho encontrar un lugar dónde comprarlo.
Las muestras serán nuestras aliadas
Nuestro primer viaje también fue el de los botes grandes; bote grande de su champú, bote grande de su colonia, bote grande de su cremita hidratante para el cuerpo. Pero eso solo nos pasó una vez, después de regresar con los botes prácticamente como los habíamos llevado, decidí que las muestras serían nuestras aliadas para los próximos viajes. Al principio, como buena madre primeriza, no sabes que cantidad de champú, colonia o crema hidratante vas a necesitar en tus viajes, pero creerme; las muestras o los pequeños botecitos son suficiente. Además las grandes marcas suelen tener en sus páginas Web apartados en los que puedes solicitar muestras gratuitas y aunque al principio podéis pensar que todas aquellas miniaturas que os regalan en las “canastillas de embarazo” no sirven para nada, lo cierto es que les podéis sacar mucho partido cuando os vais de viaje.
No ir cargados con pañales
El tema de los pañales también plantea varias dudas; ¿y si me quedo sin pañales?, ¿y si en el lugar al que voy no encuentro los que tan bien le sientan a mi bebé?… en este sentido puedo daros un consejo, porque en nuestro primer viaje también cargamos no con uno, sino con dos paquetes grandes de pañales para “por si acaso” y nos volvimos con uno de ellos sin abrir. Después de haber hecho varios viajes yo os aconsejaría que no vayáis cargados. Se que muchos tenéis una marca preferida y no queréis arriesgaros a ponerles a vuestros hijos otros diferentes, pero en ese caso yo os diría que antes de salir de viaje podéis informaros de si allí a donde vais podéis encontrar fácilmente los pañales que utilizáis. Si es así, no lo penséis dos veces, llevar unos pocos para pasar los primeros días y comprar más en vuestro destino. Aunque ¡que queréis que os diga!, si vuestros bebés tienen que estar unos días utilizando los de otra marca porque a donde vais no hay los que queréis, tampoco va a pasar nada.
Los bebés utilizan mucha ropa
Al igual que os digo que hay cosas que no vais a necesitar cuando os vais de viaje, también os aconsejaría que no os quedarais cortos con el tema de la ropa de vuestros bebés. Un niño pequeño suele manchar mucho y si estáis en un lugar en el que no tenéis lavadora, corréis el riesgo de quedaros sin ropa interior o tener que lavarla a mano por haberos quedados sin ningún body. En uno de nuestros viajes decidimos ahorrar espacio y llevar menos ropa para nuestra hija y nos quedamos cortos, por eso es importante meter varias prendas de más y tener en cuenta que los bebés pueden manchar los bodies varias veces al día, por lo que yo creo que en ese sentido no tenemos que cortarnos y meter bastante ropita.
Si vais siempre al mismo lugar dejar allí algunas cosas
Pero si algo he aprendido después de hacer varias maletas de madre primeriza, ha sido a dejar la mitad de las cosas en el lugar al que suelo ir. Nuestros viajes largos han sido casi siempre a el pueblo y allí ya hemos instalado nuestro campamento base con nuestras toallas favoritas, los botes de champú, crema y colonia, una montaña de bodys (tenemos la suerte de tener una primita allí, con algunos meses más, que nos los deja de herencia), un arsenal inmenso de pañales y sobre todo aquellas cositas que no cuesta nada duplicar y así nos ahorramos el tener que cargar con ellas siempre que vamos allí; un termómetro, un sonajero, una sabanita para dormir, una mantita, un peluche, unas tijeritas para las uñas, una esponja y un sinfín de cositas que tenemos por duplicado en nuestra casa y en la casa del pueblo.
Por supuesto que todo lo que os he contado son solo pequeños consejos o recomendaciones que yo puedo daros después de haber hecho varios viajes con la peque, pero nadie mejor que vosotros mismos para saber lo que tenéis que meter en la maleta de vuestros hijos, porque ya se sabe que lo mejor es aprender de nuestros errores.
Con el tema de la ropa y útiles de higiene completamente de acuerdo. La ropa mejor que sobre porque no sabes cuántas veces se van a manchar. Las muestras van genial. Pero en el tema medicamentos, no estoy de acuerdo contigo. Es cierto que puedes encontrar farmacias, pero muchas veces les cogen los males por la noche y no es plan de salir de madrugada en busca de una farmacia de guardia en un sitio que no conoces, así que yo siempre llevo dalsy, apiretal, estilsona y las cámaras con aerosoles, por si les da la laringitis en plena noche o les sube la fiebre…
Me gustaLe gusta a 1 persona
Siii tal vez no me he explicado bien, pero quería decir cosas innecesarias como el suero o las gasas… por supuesto que el apiretal y el termómetro siempre va con nosotras!!! Un besote
Me gustaLe gusta a 1 persona
Yo suelo contar la ropa para los días que vamos a estar fuera intento conjuntar para llevar lo menos posible.
Lo que si recomiendo es llevar cerca es decir en los asientos, yogur, bibi o potito de fruta, galletas o algo así por si hay algún atasco, algún pañal y paquete de toallitas y muy importante agua.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Que razón tienes!!! Lo de los pañales a mano en el coche es muy importante también!!!
Me gustaMe gusta
Yo ya estoy temiendo que cuando nos vayamos de vacaciones voy a cargar como una loca.. Jaja. Y tengo que llevarme cuna y trona de viaje, a parte del cochecito y las maletas.. Y el perro incluído! Toda la troupe vamos. No sé yo si cabremos.
Con lo de las muestras estoy de acuerdo (gracias por el link 🙂 guapa!! )
Me vendrán muy bien tus consejos, porque suelo ser bastante loca-exagerada.. Lo llevo de serie! Un beso
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pregunta a ver si donde vas te dan la posibilidad de que te dejen las cosas porque sino vais a tener que compraros un camión para llevar todo jajajaj!!! Ya me contaras…
Me gustaMe gusta
Espero que puedas leer “La maldición de los faraones” de Victoria Holt porque he leído por Internet que sus libros están descatalogados. Yo encontraba sus libros en Lleida Capital. En la Biblioteca tienen alguno. Yo veré si puedo encontrarlos en la Biblioteca o mirare por Sant Jordi en alguna libreria. Además yo celebro mi santo por Sant Jordi y casi cada año me regalo un libro.
Bueno, yo sigo posteando libros en mi Blog. Los pendientes de Victoria Holt y «Una fortuna peligrosa» de Ken Follet.
A lo mejor me decido a leer la saga de Camilla Läckberg. De Camilla Läckberg he leído “La princesa de hielo”.
Saludos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Seguro que en la biblioteca lo encuentro!! Y los de Camilla te los recomiendo totalmente porque si te gusta la novela policiaca y de intriga sus libros son geniales. Un beso
Me gustaMe gusta
Por cierto, a lo mejor mañana viene la peque a comer.
Veo que todas las que te comentan son mamas. Hay temas de tu Blog a los que yo no puedo opinar.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Bueno puedes ponerlo en practica con la sobri
Me gustaMe gusta
Todavía no hemos salido de viaje viaje, lo que más al pueblo y guardamos cositas allí, no todo, por ejemplo ropa y pañales dejamos lo justo por el hecho de que nos pasó una vez que cuando regresamos todo le quedaba pequeño y nos dio mucho duelo. Lo de las muestras es lo mejor.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Lo malo de dejar pañales, si no se va en una temporada es eso… que como crecen tan rapido puede que cuando volvamos no les sirvan…
Me gustaLe gusta a 1 persona
Madre mía!!! El primer viaje que hicimos con el nene yo creo que acabamos cogiendo TODO su ajuar…ni sé si dejamos algo en casa. Ni que decir tiene que no usamos ni la mitad de las cosas, era un viaje de tres días. Lo de los pañales no hace falta ni que lo cuente…no sabíamos ni donde ubicarlos en el coche…se salían por las ventanillas jakajajaja . Un beso guapa.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajajaja entonces a ti te paso como a mi… pero yo creo que ya hemos aprendido jajajaja. Un beso
Me gustaLe gusta a 1 persona
Siempre vamos cargadas con muchas cosas!!! Yo en los primeros viajes metía muchas cosas, ahora voy con mucho menos, pero lo importante siempre lo llevo. Hay cosas que siempre podrás comprar cuando llegues. Besos!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Al final cuando tienes un niño es imposible no ir cargada, pero cuanto mas economicemos el espacio mejor!! Un beso
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaj, pues yo siempre sigo llevando ropa de más, por si acaso….y el botiquín que no falte!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
En todas las ocasiones, la llegada de un niño a la familia implica cambios drásticos en las vida de los padres y en sus necesidades. Por ejemplo, un cambio muy habitual que se suele dar es la compra de otro coche más familiar. Hasta que no se tiene hijos, las personas optamos por coches más deportivos o menos espaciosos, fáciles de aparcar por su pequeño tamaño y de conducir. Ahora, cuando se es uno más en la familia, uno comienza a necesitar maletero y asientos más grandes para manipular a tu pequeño en ellos.
Me gustaLe gusta a 1 persona