Tenía muchas ganas de pasar un fin de semana en un camping en Las Landas (sur de Francia) y aunque vivimos a menos de una hora de este entorno tan bonito, la verdad es que nunca nos habíamos acercado hasta allí para pasar unos días. Pero como ya os había prometido en el post sobre planes con niños, nos hemos propuesto hacer pequeñas escapadas cada poco tiempo y el fin de semana pasado organizamos una pequeña salida antes de que a mi se me terminaran las vacaciones y la verdad es que volveremos a repetir porque lo pasamos en grande.

En el post de hoy he querido hablaros un poco del campig que elegimos para pasar esos dos días, porque creo que es una buena opción si buscáis tranquilidad o si viajáis con niñ@s muy pequeñ@s.

Buscando tranquilidad

Después de unos meses intensos de trabajo, sin a penas tiempo para estar los tres solos (mi marido, la enana y yo), la verdad es que nos apetecía pasar unos días de tranquilidad sin preocupaciones, por eso decidimos no irnos muy lejos y a un lugar en el que poder disfrutar del mar o una piscina. Las Landas , en el suroeste de Francia, es conocido como el paraíso de los surfistas y lo cierto es que sus playas hacen que parezca un lugar paradisíaco.

Kilómetros y kilómetros de fina arena y agua cristalina que contrasta con la vegetación de los alrededores y dónde se puede disfrutar en el mismo día de la naturaleza, el campo y la playa .

*Imágen obtenida del blog Pasion por el BODYSURF

El camping

Una vez elegido el destino, nos centramos en la búsqueda de «el camping perfecto». Por recomendación de nuestros cuñados, que ya habían estado varias veces en la zona, decidimos buscar en un lugar cercano a San Sebastián (ya que Las Landas es una zona que abarca muchos kilómetros). Ellos que tienen hijos más mayores habían estado en algún camping con toboganes impresionante que más parecían un aquapark que una piscina, pero nosotros pensamos que con la niña tan pequeña no le sacaríamos provecho y decidimos buscar algo más tranquilo.

Buscamos en páginas como

pero al final, como siempre, terminé volviendo a reservar el fin de semana por

 

Encontramos Le Boudigau, un camping tranquilo y de 4 estrellas en la zona de Labenne a 70km de San Sebastián.

Así por encima os cuento que hay lo que ellos llaman Mobil-Home con capacidades de 4, 6 y 8 personas, con cocina, baño y habitaciones independientes, pero también cuentan con una especie de tiendas de campaña enormes con capacidad para 12 personas.

Las piscinas están genial. Hay una parte climatizada con una zona para pequeños y otra más profunda y en la que está al aire libre también hay otra zona para los más chiquis. Además cuentan con varios toboganes, que aunque no son muy largos están muy bien para pasar un rato divertido.

Lo que más nos gustó del  camping es que tienen una zona de juegos infantiles, un parque al aire libre con mesas de pin pong y un castillo inchable, unas pistas de baloncesto, futbol y boley, un bar restaurante y un supermercado.

Otras actividades

Además nos quedamos alucinados porque durante todos los días había cosas para hacer; yoga, aquagym, minidisco para los más pequeños, alquiler de bicicletas, karaoke, veladas nocturnas, un club infantil para que los niños estén entretenidos y muchas otras actividades para no aburrirse.

Recomendaciones

Deciros que en general nos gustó todo. En la recepción se portaron super bien y nos atendieron en castellano, algo que yo agradecí porque no tengo ni idea de francés. La Mobil-Home era muy acogedora, con una terracita con mesas, sillas y tumbonas y una pequeña zona para aparcar el coche.

Pero como novatos que somos en esto de las escapadas a un camping nos faltaron muchas cosas por llevar y por eso os quiero dar algunas recomendaciones si no queréis que os salga todo bastante más caro, por tenerlo que comprar allí.

Lo primero de todo os diré las cosas que nos faltaron a nosotros:

• Sabanas
• Almohada
• Papel higiénico
• Toallas y champú de ducha
• Jabón para fregar platos y algún paño de cocina

En mi defensa diré que algunas se me olvidaron, pero otras, como el papel de baño, daba por hecho que encontraría allí.

Por lo tanto mi recomendación es que antes de ir de camping os informéis bien de las cosas que os ofrecen gratuitamente y las que ofrecen pagando.

Por último deciros que no nos movimos en todo el fin de semana del camping y que estuvimos muy a gusto, a pesar de que teníamos una playa cerca y nos habían dicho que había muchas actividades para hacer por la zona.

Aunque tuvimos que dejar la Mobil-Home el domingo temprano, nos dejaron disfrutar de las instalaciones durante todo el día sin coste adicional, algo que aprovechamos para pasar la jornada dominical a remojo en la piscina con la peque, que disfrutó como una enana y nunca mejor dicho.

Bueno resacos@s, yo lo tengo claro, volveré a ponerme mi pulserita de campista (fuera de temporada, porque sino es un poco caro) y espero que si tenéis una oportunidad de acercaros hasta esa zona la información que os he dado os sea de utilidad.

*Casi todas las fotografías que aparecen en este post son obtenidas de la página web del Camping Le Boudigau****